Durante el primer año de Presidencia de Claudia Sheinbaum, la economía de México se ralentizó notablemente, aunque esquivó las previsiones de recesión del arranque del año, bajo el impacto de la guerra arancelaria lanzada por EU y las presiones para reducir el déficit fiscal.
La revisión del TMEC asoma como el mayor foco de incertidumbre externa, mientras que el elevado endeudamiento de Petróleos Mexicanos (Pemex) complica la consolidación fiscal en 2025 y 2026, en un entorno de crecimiento menor al previsto por el propio Ejecutivo.
México registró una tasa de crecimiento del producto interno bruto (PIB) del 1.5% en 2024.
El endurecimiento comercial de Estados Unidos desde el 20 de enero de 2025, con el regreso del presidente, Donald Trump, a la Casa Blanca elevó la presión sobre México