
Narbona es una ciudad ubicada en la región de Occitania, en el sur de Francia, con una historia que se remonta a la época romana. Su casco histórico conserva vestigios de distintas etapas de su desarrollo, desde estructuras urbanas antiguas hasta construcciones medievales, lo que permite a los visitantes recorrer un entorno que combina patrimonio arquitectónico y urbano. Durante la temporada invernal, la ciudad se adorna con luces y decoraciones que generan un ambiente propio de las festividades, integrando la historia con elementos temporales que reflejan la celebración navideña.
La ciudad cuenta con una infraestructura turística consolidada que incluye museos, plazas y edificios históricos. Estos espacios facilitan que los visitantes puedan explorar su patrimonio de manera autónoma o mediante visitas guiadas, mientras que, durante la temporada navideña, se suman actividades y eventos temporales, como ferias, espectáculos y propuestas culturales relacionadas con la época. Esta combinación de patrimonio y programación estacional permite que la experiencia de visitar Narbona sea más diversa y atractiva para distintos públicos.
Además, Narbona se encuentra estratégicamente situada, lo que facilita la conexión con otras localidades cercanas mediante carretera y tren. Esta accesibilidad, junto con su patrimonio histórico, la oferta cultural y las actividades propias de la temporada de invierno, convierte a la ciudad en un destino interesante para escapadas. La combinación de historia, cultura y actividades temporales permite que los visitantes puedan planificar recorridos completos que integren ocio, turismo urbano y la atmósfera propia de la Navidad.
Mercadillo navideño de Narbona
El mercadillo navideño, denominado Fééries de Noël, inaugura oficialmente cada año el último viernes de noviembre en la Plaza del Ayuntamiento. Durante la apertura se realizan degustaciones de vino caliente y chocolate, y venta de dulces típicos de la región, incluidos los tradicionales macarons. A diferencia de otros mercados europeos, el de Narbona se mantiene activo hasta la víspera del día de Reyes, ofreciendo a los visitantes la posibilidad de disfrutarlo durante todo el período navideño.
Los puestos se instalan principalmente en la Promenade des Barques, junto al Canal de la Robine, y en la Plaza del Ayuntamiento, facilitando el recorrido a pie por casetas de madera que ofrecen productos artesanales, decoraciones, alimentos regionales y regalos. Además, se organiza una feria con atracciones de ocio variadas, que incluyen montañas rusas, trenes y juegos mecánicos, orientados tanto a niños como a adultos.
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Dentro de la programación se incluyen espacios específicos para actividades infantiles, como el Studio Photo du Père Noël, donde los niños pueden tomarse fotografías con Papá Noel, y el Palais du Jeus, una ludoteca navideña. También se instala la pista de hielo Le Patinoire, que permanece abierta durante toda la temporada, ofreciendo un espacio de recreación en un entorno urbano. La programación incluye además espectáculos de luces y eventos culturales denominados féeries artistiques, con desfiles itinerantes y actuaciones en distintos puntos de la ciudad.
La ciudad de Narbona como destino turístico
Narbona conserva un casco histórico que refleja su origen romano y su desarrollo durante la Edad Media. Entre los principales puntos de interés se encuentra el Palacio de los Arzobispos, que alberga museos y exposiciones temporales, y la Plaza del Ayuntamiento, núcleo central de la vida urbana.
Los visitantes también pueden recorrer la antigua Vía Domitia, que se conserva en el estado que quedó a finales del siglo IV, y explorar la construcción de la Catedral de San Justo y San Pastor, de estilo gótico, iniciada en el siglo XIII. Otro de los elementos de interés son las galerías subterráneas conocidas como horreum, que datan del siglo I a.C. y forman parte de la infraestructura urbana romana destinada al almacenamiento y comercio.
Además, la ciudad ofrece rutas culturales y visitas guiadas que permiten conocer su patrimonio histórico, así como museos que presentan la historia local y regional. La combinación de arquitectura, arqueología y espacios peatonales convierte a Narbona en un destino completo para quienes buscan una escapada que combine turismo urbano, cultura y patrimonio histórico.