En Colombia, un contrato por prestación de servicios es un vínculo civil a través del cual tanto empresas como empleados acuerdan de forma voluntaria las condiciones para llevar a cabo una actividad laboral.

Para ello, ambas partes deben tener claridad sobre la naturaleza del proceso, principalmente porque en este tipo de casos el servicio se presta de manera independiente y autónoma entre el contratante y el contratista.

Sin embargo, la reforma laboral introdujo algunos cambios en el marco normativo con el objetivo de redefinir la estabilidad de los empleados y replantear las obligaciones de las empresas.

Si bien esta actualización no elimina directamente los contratos de prestación de servicios, sí busca fortalecer la vigilancia sobre el uso adecuado de las medidas de seguridad social

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