La Euroliga arrancó este martes y lo hizo con la presencia de dos equipos israelíes. De momento, el deporte se mantiene al margen de vetos como el que se impuso a Rusia hace algo más de dos años, pese a que el debate está ya instaurado –especialmente en España– y la máxima competición continental de baloncesto acoge a Maccabi y Hapoel de Tel-Aviv. Y precisamente este último equipo se enfrentó al Barça, al que ajustició (103-87) en Bulgaria, su sede provisional mientras dura la guerra en Gaza.

El nuevo proyecto azulgrana no pudo contener al poderío ofensivo del equipo hebreo en el Arena 8888 de Sofía en su estreno en la nueva Euroliga pese a los destellos de algunos sus fichajes, especialmente de Will Clyburn, pero con demasiados errores defensivos que condenaron a los de Joan Peñarroya an

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