Escribe: Víctor López García, abogado penalista
“No hay peor tiranía que la que se ejerce bajo la sombra de las leyes y bajo el calor de la justicia”, decía Montesquieu. Dichas palabras resuenan ya no solo con la actualidad del Perú, sino con una historia que, lejos de ser reciente, ha dejado cicatrices profundas y una constante repugnancia hacia nuestras instituciones. La búsqueda de la protección de la justicia se ha visto desviada por conflictos de intereses envueltos en pugnas políticas, donde lo legal parece convertirse en un disfraz de lo ilegítimo, disfraz que ha sido utilizado por la Policía Nacional del Perú al declarar secretas las denuncias policiales hasta el año 2030.
Esta decisión, presentada como una medida administrativa, representa —en realidad— un acto de opacidad insti