Desde Chancay. A pocas horas de Lima se levanta un puerto del que ya se habla en todos los rincones del comercio exterior . El horizonte cambia apenas llegamos a Chancay .
Frente a nosotros se elevan las grúas, que parecían tocar el cielo y muelles interminables que se adentraban en el mar. El megapuerto ya no es un render ni una maqueta de presentación: es una obra viva , que respira y comienza a mostrar un importante movimiento económico.
Después de un corto viaje de dos horas -que con tránsito fluido puede llegar incluso a ser mucho menos- ingresamos al moderno complejo, luego de cumplir un estricto protocolo de seguridad .
El gerente general adjunto de COSCO Shipping Ports , Gonzalo Ríos , nos esperaba en la sala principal, junto a una maqueta a escala que re