El viernes de la semana pasada, ante una Asamblea General de la ONU casi vacía, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaraba desafiante que en Gaza no había hambruna gracias a la entrega israelí, aseguró, “de dos millones de toneladas de alimentos, 3,000 calorías al día” por palestino. Este jueves, la Organización Mundial de la Salud, le restregó en la cara datos comprobados: desde el bloqueo deliberado de Israel de la Franja de Gaza, han muerto de hambre 400 palestinos, de los que 80 eran menores de cinco años.
La macabra estadística -que se suma a los más de 66 mil muertos contabilizados desde que empezó la guerra, tras el ataque de Hamas de octubre de 2023, sin contar los miles que están bajo los escombros- la anunció el responsable de la OMS en los Territorios Palestinos,