Se completan 24 horas desde que la profesora Yuleima Duarte fue raptada por hombres armados en cercanías a la estación de Policía de Convención, Norte de Santander.
El hecho preocupa, no solo por la crítica situación humanitaria que se vive en el Catatumbo o la afectación a sus estudiantes, también porque Duarte necesita tomar a diario una dosis de Topamac 50 miligramos.
Desde que la Gobernación conoció su caso, se encuentra adelantando gestiones con grupos al margen de la Ley con presencia en el territorio para abogar por la pronta liberación de la profesora, a través de la Alta Consejería para la Paz.
De acuerdo con el alto consejero, Luis Fernando Niño, la entidad cuenta “con mecanismos para activar en los momentos en los que ocurren este tipo de hechos y, solamente, este año, nos ha