CNN —
El presidente Donald Trump creía que el cierre del Gobierno otorgaría a los republicanos una victoria política rápida y decisiva. Pero con la probabilidad de que el estancamiento se prolongue por segunda semana, ese cálculo parece cada vez más incierto.
La etapa inicial de la lucha por la financiación de alto perfil ha envalentonado a los legisladores demócratas y ha dejado a los votantes divididos sobre a quién culpar por el impasse, lo que ha suscitado preocupaciones silenciosas dentro de la órbita de Trump de que la política del cierre puede resultar más complicada de lo que inicialmente esperaban.
Los demócratas siguen mayoritariamente unidos en torno a sus demandas, contradiciendo las predicciones de algunos republicanos de que cederían rápidamente ante la presión. A