
En 2022, la CDMX se convirtió en uno de los 20 destinos globales de Airbnb para nómadas digitales. Ese mismo año el gobierno de la ciudad firmó un acuerdo con la empresa de hospedaje de alquiler y con la UNESCO para impulsar el turismo creativo y atraer a profesionistas que trabajan remotamente. El objetivo, según señala el comunicado emitido entonces, era generar empleos y potenciar la economía local.
A tres años de distancia, la capital, junto con otras ciudades del país, se enfrentan a las consecuencias de la gentrificación: alquileres impagables, incremento en el costo de vida y pérdida de la identidad cultural. México no es el único país que enfrenta esta situación. La creciente llegada de nómadas digitales también afecta a otros puntos de Latinoamérica , Asia y hasta Europa. Un ejemplo de esto último es Portugal, donde la gentrificación ha obligado a los habitantes a buscar otro empleo o emigrar .
El problema de la gentrificación en Portugal
Todo comenzó en 2009, cuando se establecieron exenciones fiscales para atraer capital extranjero a Portugal luego de que la crisis financiera de 2008 golpeara duramente a la nación. Al principio, dicha legislación ofreció ventajas totales, luego parciales, pero a finales de 2023 se anunció que el país dejaría de dar exenciones sobre la renta a extranjeros que vivieran a tiempo parcial. La razón: estas generaban " injusticia fiscal " y alimentaban la burbuja inmobiliaria.
Este nuevo enfoque duró poco. Hace algunos meses, el nuevo primer ministro, Joaquim Miranda Sarmento, anunció que su gobierno reintroduciría los beneficios fiscales con el fin de atraer de nuevo a trabajadores extranjeros " altamente calificados ". De acuerdo con Fortune , el país eliminó el impuesto del 20% que cobraba a personas que desempeñaban puesto considerados " de alto valor agregado ", como médicos, trabajadores tecnológicos o periodistas. En su lugar, los trabajadores extranjeros calificados contaban con la misma tasa impositiva progresiva que los ciudadanos portugueses: entre el 14,5% y el 48%.
Según Euronews , el salario mínimo mensual en ese país ronda los 870 euros (alrededor de 18,790 pesos mexicanos), mientras que muchos de los extranjeros que llegan como residentes temporales ganan sueldos superiores a esa cifra. De hecho, en 2022 se estableció que uno de los requisitos para acceder al visado de " nómada digital " es ganar al menos 3,200 euros al mes (más de 69,000 pesos), lo cual pone en seria desventaja a los locales.
Portugueses, entre el pluriempleo y la emigración
En una encuesta realizada por Statistics Portugal , el 5% de los portugueses en edad laboral declaró tener dos o tres trabajos, pues los bajos salarios no les permiten llegar a fin de mes en un país donde la vida es cada vez más cara. Por si fuera poco, los recién graduados se ven en la necesidad de buscar nuevas oportunidades laborales en el extranjero. Según el Observatorio de Emigración de Lisboa, citado por Schengen News , la nación ocupa el lugar número ocho del mundo en tasa de emigración, y el 25% de la misma habita en otro país.
Como señala Genbeta , aunque la situación económica del país ha mejorado bastante, es entre las personas menos formadas donde se ha observado un mejor crecimiento económico, lo que orilla a las personas con estudios superiores a emigrar. La mayoría de los trabajadores cualificados se concentra en Bélgica, Irlanda, Reino Unido y otros países de Europa. Según expertos, " las ventajas fiscales que atraen a los extranjeros a Portugal también han alejado a los jóvenes locales ".