Nicolás Petro, hijo del presidente de Colombia, Gustavo Petro, admitió haber recibido $1.300 millones de pesos pero negó que fueran para la campaña presidencial de su padre en 2022, al asegurar que esos recursos provenían de préstamos lícitos destinados a la compra de una casa y no a la comisión de los delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos por los que es procesado.
En una entrevista concedida a la revista Cambio, el exdiputado del Atlántico explicó que, si bien recibió la suma mencionada, su origen es legal y no guarda relación con la contienda electoral que llevó a su padre a la Casa de Nariño.
“Mucha de esa plata fueron préstamos y están reportados tanto a las personas como en mi declaración de renta, entonces yo cogí esa plata para comprar una casa. Esa es la realidad