La ingesta de bebidas alcohólicas adulteradas con metanol, un tóxico industrial, desató una grave emergencia nacional de salud en Brasil, con epicentro en San Pablo. Con dos fallecimientos confirmados, el pánico vació bares y llevó al Gobierno a solicitar a la población que evite el consumo de destilados.
Además, hay al menos siete fallecimientos sospechosos. Todas las víctimas ingirieron, sin saberlo, bebidas alcohólicas adulteradas, incluyendo caipirinha.
El metanol es una sustancia sumamente venenosa para los humanos, utilizada habitualmente en la producción de disolventes y pinturas. Al ser ingerido, el metanol se metaboliza en compuestos tóxicos como el ácido fórmico y el formaldehído, que pueden ser letales.
Los principales síntomas reportados por los afectados incluyen náuseas, v