El descubrimiento ocurrió detrás de unos talleres de mecánica, donde inicialmente se pensó que el mal olor provenía de un animal muerto. Sin embargo, la curiosidad de algunos residentes los llevó a acercarse hasta la orilla de la quebrada, donde se encontraron con la aterradora escena.

De inmediato, los habitantes del sector alertaron a la línea de emergencias 123 , y una patrulla de la Policía Metropolitana de Bucaramanga acudió al sitio para verificar la información. Los uniformados confirmaron que se trataba de un cuerpo humano en avanzado estado de descomposición, por lo que solicitaron el apoyo del Cuerpo de Bomberos de Floridablanca .

El área fue acordonada mientras las unidades de rescate y los peritos de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) adelantaban las labor

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