El árbol de Navidad verde con luces y guirnaldas comienza a perder protagonismo en Europa . En su lugar, crece una tendencia que combina estética moderna, conciencia ambiental y practicidad: el árbol de madera. Esta opción, que hasta hace poco era una curiosidad decorativa, se consolida como una alternativa elegida por familias y diseñadores.
En ciudades como Berlín, Madrid o Copenhague, los comercios de diseño exhiben modelos de diferentes tamaños y formatos. Algunos son simples estructuras de listones, otros adoptan formas tridimensionales con luces integradas. Todos comparten un mismo objetivo: reducir el uso de plástico y ofrecer una pieza duradera, reutilizable y fácil de adaptar a distintos ambientes.
El cambio de esta costumbre navideña
Lo cierto es que esta transición no