La cita promovida por Orbán incomoda a Europa y obliga al avión del Kremlin a contar con permisos excepcionales para sobrevolar el cielo comunitario o a realizar un viaje mucho más largo

Que el estadounidense Donald Trump y el ruso Vladímir Putin vayan a reunirse en Budapest para hablar de la paz en Ucrania es un desaire para Europa. La cita en la capital húngara , con el nacionalpopulista Viktor Orbán, aliado de Trump y considerado el submarino del Kremlin en la UE, pone al resto de líderes europeos, a la cúpula de las instituciones comunitarias y a la OTAN (de la que también forma parte Hungría) en una vergonzante e incómoda situación. Trump y Putin hablarán de Kiev en un país de la UE, pero sin que la Unión asista. Y la logística constituye un auténtico desafío que ejemplifica bien e

See Full Page