ISLAMABAD, Pakistán (AP) — Delegaciones de Afganistán y Pakistán llegaron el sábado a la capital de Qatar, Doha, con la esperanza de aplacar la crisis más letal entre las dos naciones en años, después de más de una semana de enfrentamientos que dejaron decenas de muertos y cientos de heridos a ambos lados de la frontera.
Ambos gobiernos han enviado a sus ministros de Defensa para liderar unas conversaciones, que, según Pakistán, se centrarán en “medidas inmediatas para poner fin al terrorismo transfronterizo que emana de Afganistán y restaurar la paz y la estabilidad a lo largo de la frontera”.
Tanto Kabul como Islamabad sostienen que están respondiendo a la agresión del otro. Afganistán niega que de cobijo a insurgentes que perpetran ataques en zonas fronterizas.
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