Sucede más a menudo de lo que parece. Llega la noche, el día ha sido largo, la lista de tareas no da tregua y el cansancio es evidente. Los párpados pesan, la mente pide descanso… pero justo cuando por fin te tumbas, ocurre lo contrario a lo esperado: una repentina oleada de energía . No puedes dormir, no paras de dar vueltas en la cama, revisas el móvil o incluso te pones una serie. ¿Qué ha pasado con el sueño que parecía inminente?
Lejos de ser un misterio sin resolver, este fenómeno tiene nombre y explicación. Los especialistas lo llaman “segundo aire” , second wind en inglés: un estado de activación fisiológica que ocurre cuando el cuerpo, por razones químicas y conductuales, pierde su “ventana natural” de sueño . Y entender por qué sucede puede ser la clave para dormir mejor.