Atadas con un hilo color naranja como si fueran hallaquitas, dentro tenían materia orgánica verde, sin relleno alguno, tratándose de yerbita.

Yendo más allá en el análisis, ese monte inofensivo de 32 gramos de peso, resultó ser un alucinógeno llamado marihuana y R. Rojas de 38 años perdió el chivo y el mecate, terminando en la celda más vigilada, a tiro de la oficina del Com/J Petit.

Al aprehendido, se le precalificó el delito de:

El caso pasó a estudio de la Fiscalía V del Ministerio Público.

Nadie lo mandó, queriendo surgir más bien se hundió. No aprenden vale.

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