María Elena Andrade Ramírez enfrenta un clima cada vez más tenso al frente de la Fiscalía General del Estado. Las agresiones recientes en algunos de sus edificios y las voces que empiezan a pedir su renuncia reflejan la presión política y mediática que rodea su gestión.
Pero Andrade Ramírez ha dejado claro que no cederá: “está al 100”, y asegura contar con el respaldo de la gobernadora. Más que una simple declaración, es un mensaje de firmeza frente a quienes intentan desgastarla.
La Fiscalía atraviesa un momento delicado, y la reacción de su titular será determinante no sólo para su permanencia, sino para la percepción de independencia y fortaleza de la institución.
ALZAN VOZ CONTRA REFORMA
La Barra Mexicana, Colegio de Abogados, se unió ayer a las voces que critican y se han posicion