**Wells Fargo y Morgan Stanley analizan el futuro cambiario de Argentina**

El banco estadounidense Wells Fargo ha expresado sus preocupaciones sobre el actual esquema cambiario de Argentina, especialmente en el contexto de las elecciones de medio término. En su último informe, la entidad anticipa que el peso argentino podría experimentar una depreciación significativa en los próximos años. Según Wells Fargo, “esperamos un mayor grado de depreciación del peso en adelante respecto de nuestras proyecciones anteriores”.

El respaldo del Tesoro de Estados Unidos, que incluye un swap por USD 20.000 millones, se considera como un intento de estabilizar el tipo de cambio. Sin embargo, Wells Fargo advierte que este apoyo no es una solución sostenible. “Defender una moneda sobrevaluada después de las elecciones parece una política cambiaria inadecuada”, afirmaron. Además, el banco estima que el peso podría ser dejado flotar libremente, con intervenciones cambiarias esporádicas por parte de Estados Unidos.

Por su parte, Morgan Stanley ha planteado tres escenarios posibles para la economía argentina tras las elecciones del 26 de octubre. En el primer escenario, si la fuerza opositora, Fuerza Patria, obtiene entre el 35% y el 40% de los votos, se prevé que las políticas económicas se vuelvan más viables. Esto podría permitir un régimen cambiario totalmente flotante y un ajuste ordenado del tipo de cambio, que se situaría en torno a 1.700 pesos por dólar.

En el segundo escenario, si la oposición gana por pocos puntos, se anticipa que el tipo de cambio podría estabilizarse entre 1.800 y 2.000 pesos. Sin embargo, esto podría requerir un tipo de cambio más débil para compensar la incertidumbre política. Morgan Stanley señala que “la mayor incertidumbre afectaría el crecimiento”, lo que podría limitar la inversión extranjera directa.

El tercer escenario contempla una derrota significativa de la fuerza oficialista, donde el tipo de cambio podría superar los 2.000 pesos. En este caso, se prevé un ajuste desordenado y una inflación elevada, lo que resultaría en una actividad económica débil. “Los proyectos de inversión extranjera directa serían limitados en alcance y escala”, concluye el informe de Morgan Stanley.

Ambos bancos coinciden en que el futuro económico de Argentina dependerá en gran medida de los resultados electorales y de las decisiones políticas que se tomen a partir de entonces. La situación cambiaria sigue siendo un tema crítico en el país, con implicaciones significativas para la economía y la estabilidad financiera.