El boca de urna es un relevamiento que se realiza a la salida de las escuelas de votación para estimar tendencias antes del escrutinio oficial. En las elecciones 2025 su uso está regulado por ley y genera expectativas en cada comicio.

En las elecciones 2025 vuelve a tener protagonismo. Empresas encuestadoras y consultoras políticas despliegan equipos en diferentes puntos del país para preguntar a los votantes, de forma anónima, a quién eligieron en la urna. Estos datos, procesados estadísticamente, permiten elaborar proyecciones rápidas. Sin embargo, no son resultados oficiales y pueden diferir del escrutinio definitivo.

Este tipo de sondeo tiene tanto defensores como detractores. Quienes lo apoyan destacan que ayuda a tener una idea preliminar de la tendencia electoral, mient

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