El año pasado asumió la gerencia de Pirotecnia Oscense, siguiendo los pasos de su padre, Javier, que la fundó en 1978 junto a otro socio, Gonzalo Hernández. Jesús, con 16 años ya empezó a trabajar los veranos y descubrió que esa iba a ser su profesión y en el año 2000 se incorporó a la empresa.
¿Qué es lo primero que se le viene a la mente con el olor a pólvora?
—Es una cosa que tengo ya tan metido dentro que ya no lo hueles, pero ese olor es mi vida, y no sé qué se sentiría si no lo tuviera. Aunque ahora estoy mucho más en oficina que en la fábrica.
¿Es usted más de traca o de castillos de fuegos?
Soy más de espectáculos de fuegos artificiales, porque es lo que más hacemos aquí. La traca, como se lleva en Valencia, las mascletas, no se lleva tanto en Aragón. Me gustan verlas, pero ten

Diario del Alto Aragón

Newsweek Video
AlterNet
Verywell Health
Essentiallysports
NBC 5 Dallas-Fort Worth Sports
Reuters US Business