Lo que comenzó como una investigación sobre apuestas inusuales en un partido de Charlotte en marzo de 2023 se convirtió en una advertencia sistémica. Las casas de apuestas detectaron movimientos extraños en las prop bets relacionadas con Rozier: minutos jugados, puntos anotados, asistencias. Algo no cuadraba. La liga lo vio en tiempo real, pero no tenía suficiente evidencia para actuar. Eso no significa que no fuera peligroso.

Entonces llegó el caso de Damon Jones . Exjugador, ahora acusado de entregar información privilegiada sobre el estado físico de LeBron James y Anthony Davis antes de que la NBA lo hiciera público. No se trató de un error de comunicación. Fue un flujo de datos: nombres, grados de lesión, pronósticos de retorno —todo vendido a apostadores que actuaban con ve

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