HOLLYWOOD – La directora de cine Kathryn Bigelow vuelve a detonar controversia con «Una casa de dinamita», el nuevo thriller político de Netflix que ha sacudido más que emociones: también puso en guardia al mismísimo Pentágono. En el film la guionista estadounidense, conocida por explorar los límites entre el deber y la moral, expone las grietas de la defensa estadounidense con una crudeza que ni los misiles pudieron anticipar.

La cinta sigue los 18 minutos más tensos que podría vivir un país: los que transcurren entre el lanzamiento de un misil nuclear hacia Estados Unidos, y la respuesta desesperada del gobierno por identificar al responsable y decidir cómo actuar. En medio del caos, las decisiones políticas, la presión militar y la fragilidad del sistema quedan al descubierto en un rel

See Full Page