El nuevo proyecto cinematográfico de Woody Allen contará con el patrocinio de la Comunidad de Madrid para que el rodaje se produzca en la región y el propio nombre de Madrid forme parte del título de la película. Así consta en un contrato publicado por el Gobierno regional que compromete 1,5 millones de euros públicos, que serán abonados a las productoras encargadas del filme, para intentar atraer así a más turistas.

El objetivo principal de este patrocinio, adelantado por El País , es convertir Madrid en una de las regiones más interesantes para el turismo cinematográfico, explica el Gobierno regional en el documento con el que justifica el patrocinio: “Las localizaciones que aparecen en películas o series pueden despertar el interés de los espectadores y motivarlos a viajar a ese destino”, apunta el documento firmado por la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, de la que parte la idea.

La beneficiaria del patrocinio será la sociedad Película WASP A.I.E., constituida por las productoras Wanda Vision y Gravier Production. El abono de los 1,5 millones se distribuirán entre este año y 2027, cuando finalizará el patrocinio, y están sujetos a que el título del largometraje contenga la palabra “Madrid”, según los pliegos de la adjudicación a la que ha tenido acceso Somos Madrid.

El guion y la dirección de la película correrá a cargo de Woody Allen, a quien la Comunidad de Madrid define como “uno de los artistas contemporáneos más polifacéticos del panorama cinematográfico, que ha configurado uno de los estilo más originales y valorados”. Por otro lado, su largometraje “reúne excelentes condiciones de impacto y constituye un más que óptimo canal de promoción de la Comunidad de Madrid como destino turístico”, añaden desde el Gobierno de Ayuso.

Entre los detalles de las exigencias incluidas por la Comunidad de Madrid en el desarrollo del filme, se exige que toda la película se ruede íntegramente en la región, con un mínimo del 15% de escenas en exteriores, con “espacios y lugares característicos de Madrid capital, incluyendo al menos otra localización identificable y característica fuera de la ciudad”.

El Gobierno de Ayuso también se asegura aparecer junto a Woody Allen y los protagonistas de la película tanto en la rueda de prensa de inicio del rodaje como durante la grabación y la premiere mundial del filme, que deberá tener lugar “en un festival internacional de reconocido prestigio”.

Patrocinios a Woody Allen, marca España

El desembolso de dinero público al director neoyorkino por parte de Ayuso es el último de una nutrida lista de gobiernos de distintos signos políticos que abonaron importantes sumas para que Woody Allen rodara en sus ciudades y regiones. El caso más evidente fue el de las aportaciones que recibió Vicky Cristina Barcelona por parte del consistorio de la ciudad condal y de la Generalitat de Catalunya para hacerse con el rodaje.

“Desde que se hizo público que la película se haría en Barcelona no para de salir en los diarios de todo el mundo”, argumentaba por aquel entonces el gobierno de José Montilla para justificar el desembolso de hasta dos millones de euros para conseguir introducir la capital catalana en el título. A esta cantidad se le sumarián otros 250.000 euros en subvenciones y otros apoyos procedentes de Asturias, donde se rodó parte de la película.

La ciudad de San Sebastián también apoyó un rodaje de Woody Allen, que tuvo lugar en el año 2019 y que alumbró Rifkin's Festival , una película que pasó bastante más desapercibida que la rodada en Cataluña. En el caso vasco, la capital guipuzcoana apoyó con unos 60.000 euros en la aportación de gastos logísticos de la grabación.