El jurado popular ha declarado culpable al triple asesino de Morata de Tajuña (Madrid) en menos de 48 horas desde que finalizó el juicio en la Audiencia Provincial. El tribunal, tras escuchar al acusado en la última jornada de la vista oral, le ha declarado culpable por unanimidad.

El juicio contra el asesino confeso de Morata de Tajuña quedó visto para sentencia este martes tras el interrogatorio del acusado, quien en primer lugar pidió perdón por matar a los tres septuagenarios  el 17 de diciembre de 2022.

«Yo estaba mal.  Mi cabeza no estaba bien.  Escuché voces por mi enfermedad. Las voces me llevaron ahí. Salté la pared porque quería hablar con ellos pero  sacaron cuchillos y yo vi un palo de hierro y les di », confesó el asesino a preguntas del fiscal.

«No huí a Pakistán por falta de dinero»

Dilawar Hussein relató que prestó 40.000 euros a las hermanas y que estaba arruinado, por lo que tuvo que cerrar su locutorio. Tras ello, vivió seis meses con las víctimas. También reconoció que no huyó a Pakistán porque no tenía dinero .

El móvil del crimen fue la deuda que tenían las hermanas Amelia y Ángeles con el acusado, a quien debían 60.000 euros. Amelia y Ángeles fueron víctimas de una estafa del amor a manos de unos supuestos militares americanos destinados en Afganistán, a quienes mandaban dinero desde el locutorio que regentaba Dilawar.

En sede policial, manifestó a los investigadores que les mató con una barra de hierro que había en el domicilio y que volvió a los días para tratar de quemar los cuerpos. Además, aseguró que estaba «loco».

«El acusado exagera su enfermedad»

La fiscal se opuso a que se le aplicaran los atenuantes de confesión y arrebato al acusado del triple crimen de Morata de Tajuña y explicó que las hermanas fueron víctimas de una estafa y hubo voluntad por parte de Dilawar de matar a las víctimas por cómo cometió el crimen con golpes en la cabeza con una barra de hierro.

La fiscal sí admitió que el acusado padecía una alteración psíquica, «aunque lo ha exagerado» , recalcó. Así, solicitó que se le condene a 36 años de prisión  por tres delitos de homicidio y un delito de quebrantamiento de condena, con una atenuante por alteración psíquica.

La defensa reclamó una pena de  siete años y medio de cárcel por homicidio con las atenuantes de trastorno de personalidad paranoide, confesión y arrebato u obcecación. Según el abogado del acusado, su cliente tenía un trastorno, acreditado en los informes médicos, y por tanto «es otra víctima».

«Estafa del amor»

Las hermanas de Morata de Tajuña sufrieron una  estafa amorosa  a través de internet por parte de unos supuestos militares americanos destinados en Afganistán que les solicitaban dinero. Así, cuando se quedaron sin ahorros, pidieron un préstamo de 60.000 euros al que sería su asesino. Conocían a Dilawar, apodado  el Negro , de haberle alquilado una de las habitaciones de su casa.

Al negarse las hermanas septuagenarias a devolver el dinero, Dilawar comenzó a amenazarlas y agredirlas. En septiembre de 2023, un juez de Alcalá de Henares impuso al acusado una orden de alejamiento respecto de una de las hermanas, tras golpearla en la cabeza.

A mediados de enero de 2024, los vecinos denunciaron la desaparición de las víctimas sin saber que un mes antes, el 17 de diciembre de 2023, Dilawar había matado a las dos y a un tercer hermano. Dilawar fue detenido un mes después.

A golpes con una barra de hierro

Los hechos se produjeron la mañana del 17 de diciembre de 2023, cuando el asesino de Morata de Tajuña acudió al domicilio donde residían los tres hermanos asesinados.

Tras escalar el muro, llamó a la puerta del domicilio, y cuando le abrieron la puerta, mató a los tres hermanos a golpes con una barra de hierro. Dos días después, el asesino de Morata de Tajuña volvió a la casa de las víctimas para intentar quemar los cadáveres.

Según los informes forenses acreditados durante el juicio, el asesino de  Morata de Tajuña  tenía disminuidas sus capacidades intelectivo-volitivas de forma leve en el momento de los hechos, ya que  sufre un trastorno  paranoide de personalidad.