Una jueza federal ha extendido su orden que prohíbe al presidente Donald Trump desplegar tropas de la Guardia Nacional en Portland, Oregon, hasta este viernes. La decisión mantiene a los soldados en un estado de incertidumbre mientras continúa el enfrentamiento legal sobre el poder presidencial.
La jueza de distrito de EE.UU., Karin Immergut, tomó esta decisión tras un juicio de tres días. En este, se debatió si la administración Trump había violado la ley al federalizar e intentar desplegar tropas de Oregon y California en la ciudad. Este caso ha tenido múltiples giros, desarrollándose tanto en el tribunal de distrito como ante jueces de apelación.
El fallo se produce en un contexto donde la administración Trump enfrenta varios desafíos sobre su autoridad para enviar tropas de la Guardia Nacional a las ciudades. Un tribunal federal bloqueó el despliegue de la Guardia Nacional en Chicago el mes pasado, y la Corte Suprema solicitó informes adicionales sobre este caso.
Las tropas de la Guardia Nacional han estado acuarteladas en bases de entrenamiento en Portland durante semanas. Fueron activadas para proteger a funcionarios federales y una instalación de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que ha sido el foco de protestas diarias desde junio.
Los abogados federales argumentan que Trump tiene la autoridad para responder a las protestas, que describen como violentas. Sin embargo, los abogados estatales y municipales consideran que esta medida es “una de las infracciones más significativas” a la soberanía de Oregon.
La orden de Immergut indica que el Gobierno federal no pudo demostrar que la situación en Portland estuviera fuera de control. En su dictamen, la jueza señala que no hay pruebas creíbles de que las protestas hayan superado casos aislados de violencia.
"Este tribunal no encuentra pruebas creíbles de que durante los aproximadamente dos meses previos a la orden de federalización del presidente, las protestas se salieran de control", afirma la jueza.
Immergut dictaminó que el despliegue de la Guardia Nacional en Oregon excedió la autoridad legal del Gobierno federal y violó la Décima Enmienda, que protege la soberanía estatal.
Se espera que la orden de Immergut sea apelada rápidamente. Mientras tanto, una decisión del Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito que permite a Trump desplegar tropas de la Guardia Nacional en Portland está siendo reconsiderada por un panel ampliado de 11 jueces.
El juicio de octubre reveló que las tropas de la Guardia Nacional estuvieron en las instalaciones de ICE en Portland incluso después de que la jueza ordenara que no se presentaran.
Un abogado del Departamento de Justicia argumentó que tomó tiempo implementar la orden. Además, altos funcionarios de seguridad de ICE no fueron consultados antes de que Trump ordenara el envío de tropas, lo que generó sorpresa entre ellos.
El juicio también abordó la naturaleza de las manifestaciones y si las fuerzas del orden locales podían manejarlas. La situación en Portland sigue siendo tensa mientras se desarrollan los procedimientos legales.

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