La iglesia más alta del mundo se podía contemplar en Ulm , una ciudad alemana de poco más de cien mil habitantes. Se trata de un imponente templo gótico coronado con una aguja, con la que alcanza los 161,53 metros de altura. Este es uno de los principales atractivos turísticos de esta ciudad germana, aunque ya no podrá presumir de que la iglesia, símbolo local y nacional, es el templo más alto del mundo. 

Ese título lo ostenta ahora la Sagrada Familia de Barcelona, que ha superado a la iglesia de Ulm por escasos metros, tras haber colocado la primera gran pieza de la cruz que corona la torre de Jesucristo, una de las partes que aún está sin finalizar. 

La colocación de esta primera pieza de la cruz eleva la basílica diseñada por Antoni Gaudí hasta los 162,91 metros, de manera que supera por poco más de un metro a la iglesia de la localidad alemana de Ulm, cuya aguja alcanza los 161,53 metros, según figura en la página web oficial del templo germano.

Pero la Sagrada Familia aún crecerá más. Cuando termine la instalación de toda la cruz alcanzará los 172,5 metros . Se pondrá casi a la altura de sistemas montañosos, porque quedará ligeramente por debajo de la montaña barcelonesa de Montjuïc (173 metros) por deseo expreso de Gaudí, que no quería sobrepasar un elemento de la naturaleza porque lo consideraba como una “obra de Dios”.

En todo caso, la basílica de Gaudí quedará muy por encima de la iglesia alemana de Ulm , una de las infraestructuras europeas más alabadas en las últimas décadas, porque casi ningún templo presentaba la solera de más de 161 metros de altura. Aunque su historia va más allá de su altura. 

La iglesia de Ulm: todo un símbolo

El proyecto de Ulm siempre fue ambicioso . La primera piedra de este ingente edificio se colocó el 30 de junio de 1377. Pero, ¿por qué impulsar la construcción de un templo de semejantes dimensiones? Según explican las autoridades alemanas en su web, se hizo así para brindar mayor seguridad a los feligreses, ya que la antigua iglesia parroquial se encontraba fuera de las murallas de la ciudad y asistir a misa en tiempos bélicos era todo una heroicidad.

Al igual que Sagrada Familia de Barcelona, la construcción no fue fácil. De hecho, en 1543 se paró por falta de fondos . Y se terminó gracias a la aportación de los habitantes de la ciudad, ya que no fue financiada por la iglesia ni por gobernantes locales. Tampoco por empresarios. La construcción no se reanudó hasta mediados del siglo XIX y se terminó en 1890, 613 años después de que comenzara su construcción de la que, hasta ahora, había sido la iglesia más alta del mundo. 

En esta localidad alemana se lo toman con humor. “Desde ayer, la catedral de Ulm ya no tiene la aguja de iglesia más alta del mundo. Pero Ulm sigue siendo Ulm. Y eso es lo mejor de todo. Además: el tamaño no lo es todo ”, han escrito las autoridades en sus redes soci