¿Y si la ansiedad por separación de tu perro tuviera tanto que ver con su tripa como con su corazón? Un reciente estudio publicado en Scientific Reports (Nature, 2025) ha vuelto a poner sobre la mesa una idea que gana fuerza entre veterinarios, etólogos y educadores: el bienestar emocional y el equilibrio intestinal están profundamente conectados.

Lo que ocurre en el intestino no se queda allí. A través de una compleja red de comunicación (el llamado eje intestino-cerebro) las bacterias, las moléculas inflamatorias y los neurotransmisores envían mensajes constantes al sistema nervioso central. Cuando ese diálogo se altera, también lo hace el estado de ánimo.

El trabajo, desarrollado por un equipo internacional de investigadores, detalla cómo el intestino actúa casi como un segundo cerebr

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