La capilla del Museo Barjola se ha teñido con pinceladas de naranja que se ven y también se escuchan. El compositor, artista y profesor ... de musicología en la Universidad de Oviedo Edson Zampronha ha encontrado el sonido equivalente al tono de su pincel y lo afina sobre un re imperfecto –que tiende a bemol– en el que vibran sonidos de gaitas, un grillo, unos pies que pisan hojas, un piano o una campana y que se activan, gracias a un sistema de sensores, cuando el público interactúa con la obra y el espacio, pero sin seguir nunca un patrón. «La música que escuchamos no está pregrabada, sino que se va formando», explica el artista, de forma que cada usuario vivirá una experiencia personal e irrepetible.

Preside la sala una gran lona «que no es ni figurativa ni abstracta», sino que

See Full Page