Luego de una serie denuncias anónimas, en Tucumán se destapó un escándalo y puso en jaque a la cúpula de la Policía, tras comprobarse que sacaban presos de la comisaría para trabajar como albañiles en la casa de fin de semana de una autoridad policial . También ponían a trabajar a policías.

El caso tuvo una gran repercusión y ya provocó la caída de los máximos responsables de la Unidad Regional Norte. Hay cuatro detenidos.

La irregularidad salió a la luz a partir de llamados anónimos al ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, que alertaron sobre la presencia de detenidos y policías haciendo tareas de construcción en una casa que sería propiedad de Gustavo Beltrán, jefe de la Unidad Regional Norte.

El funcionario informó de inmediato al gobernador Osvaldo Jaldo, y ambos recurr

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