El sonido del despertador va seguido de un gesto casi reflejo: estirar la mano, coger el móvil y sumergirse en un torrente de notificaciones, correos y noticias. Esta acción, aparentemente inofensiva, es uno de los hábitos que más perjudican la salud emocional desde primera hora de la mañana. Así lo advierte el médico psiquiatra Fernando Mora , quien señala que empezar el día con una avalancha de estímulos impide al cerebro tener un despertar progresivo y sereno, fundamental para afrontar la jornada con equilibrio.

Según el experto, dedicar los primeros minutos del día a uno mismo, ya sea estirando, respirando profundamente o simplemente planificando mentalmente las próximas horas, marca una diferencia sustancial. Este simple cambio ayuda a establecer un tono positivo y calmado ,

See Full Page