La comunidad católica del municipio Caroní se prepara para una gran celebración el 18 de noviembre de 2025, en honor a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá. Esta jornada litúrgica se ha convertido en una tradición en el estado Bolívar desde la llegada de la réplica de la Virgen en 2013. La parroquia San Pedro y San Pablo, situada en el sector El Guamo, será el escenario de la misa solemne, la peregrinación y otros actos devocionales que reunirán a fieles de Ciudad Guayana y a la creciente colonia zuliana en la región.

La réplica de la Virgen, autorizada para el estado Bolívar por el emérito monseñor Ubaldo Santana, fue recibida hace doce años por el padre Luis Gaitán. Desde entonces, ha formado parte de la identidad espiritual y cultural de la zona. Albenis Álvarez, periodista zuliano y custodio de la imagen, ha subrayado en varias ocasiones la relevancia de este símbolo en la vida religiosa local.

El programa religioso del 18 de noviembre comenzará a las 6:00 a.m. con la Misa de Aurora y Laudes en el Monasterio de las Hermanas Brígidas. A las 5:20 p.m., se llevará a cabo el rezo del Santo Rosario en la sede parroquial, seguido a las 6:00 p.m. de la Eucaristía Solemne en honor a la Virgen de Chiquinquirá. Esta misa será acompañada de serenatas de grupos gaiteros y otras agrupaciones musicales, así como iniciativas infantiles.

Este año, la festividad coincide con un periodo de intensa actividad pastoral, durante el cual la imagen ha visitado más de un centenar de hogares en los sectores de la parroquia San Pedro y San Pablo. Esta cercanía ha reforzado la conexión de la Virgen con la comunidad local.

La presencia de la Chinita en Ciudad Guayana es considerada por sus custodios como una bendición para un territorio influenciado por los ríos Orinoco y Caroní. La advocación mariana, que tiene profundas raíces en el Zulia, ha encontrado en el sur de Venezuela una nueva forma de expresión de fe. La parroquia invita a todos los habitantes del municipio Caroní a unirse a esta jornada de oración, encuentro y música tradicional, donde la devoción mariana une a familias, migrantes internos y nuevas generaciones bajo la protección de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá.