El fuego crepita en el campo escaqueado. Se mantiene la luz y el calor de un suceso inesperado, trascendente, de alto valor deportivo individual para América Latina. En las últimas dos semanas difícilmente algún actor del deporte universal fue seguido con tanto interés y expectación, desde el río Bravo a la Patagonia e incluso en España, como ha sido el GM peruano-mexicano José Eduardo Martínez Alcántara, de 26 años.

Su actuación en la Copa Mundial que organiza la Federación Internacional de Ajedrez y que finaliza el 26 de noviembre en Goa, India, con la presencia original de 206 jugadores de 80 países, ha sido asombrosa.

Llegó a los cuartos de final en una competencia áspera, cruel, hermosa, espectacular, un circo romano de matches feroces en diferentes ritmos de juego, en la que la may

See Full Page