Vivimos una era de incertidumbre acelerada. La realidad de hoy no solo cambia rápido: cambia mientras estamos hablando, mientras planificamos, mientras pensamos. Y quizás este sea uno de los mayores puntos ciegos del liderazgo moderno: creemos que lideramos después de entender lo que pasa, pero en verdad lideramos mientras está pasando.
Ese “mientras tanto” —ese espacio ambiguo, incómodo e impredecible— se convirtió en el escenario donde se toman las decisiones más importantes. Ya no existe la estabilidad como punto de partida; ahora es la excepción. En este nuevo contexto, el líder que espera “tener todo claro” antes de actuar se condena a la irrelevancia.
En otras palabras: la velocidad dejó de ser una ventaja; ahora es el piso mínimo para jugar.
El mito del control total
Durante déc

El Cronista

Todo Noticias Sociedad
El Destape Sociedad
KCRG Iowa
Raw Story
Reuters US Domestic
AlterNet
WRDW-TV News 12 Crime
The List
She Knows