Durante mucho tiempo se creyó que dormir con plantas era perjudicial para la salud por el supuesto consumo de oxígeno que realizan por la noche.

Sin embargo, este mito carece de fundamento científico. Estudios como el realizado por la NASA en 1989 demostraron que muchas especies vegetales no solo son seguras, sino que ayudan a purificar el aire y reducir la presencia de sustancias tóxicas en interiores.

Además de oxigenar el ambiente , las plantas aportan beneficios emocionales. Un artículo publicado en la plataforma científica MDPI, que analizó 19 estudios realizados en ocho países, concluyó que incluso una pequeña presencia de vegetación puede ayudar a reducir la ansiedad y mejorar la sensación de bienestar.

Cuidarlas y observar su crecimiento también promueve hábitos de a

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