Cuadrillas de trabajadores de las secretarías de Obras y Medio Ambiente se han encargado del derribo. Foto: Eduardo Jiménez

Alrededor de una veintena de palmeras fueron taladas y seccionadas en la avenida Tamaulipas, en la colonia Condesa . Otras más fueron retiradas desde la raíz.

Los ejemplares, que lucen secos en sus troncos y follaje, fueron seccionados entre el miércoles y el jueves, relataron vecinos consultados por este diario.

Alejandro Pérez Tamayo, especialista en ingeniería forestal egresado de la Universidad de Kioto, dijo en entrevista con Excélsior que a simple vista las palmeras derribadas lucen “muertas o dañadas en su follaje y cuerpo o tronco”.

Sin embargo, precisó que se requieren estudios especializados para determinar que una especie está seca o muerta en pie.

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