El auge de la Inteligencia Artificial (IA) Generativa ha provocado una explosión en la demanda de chips de alto rendimiento (GPUs), desatando una «fiebre del oro» en el sector de semiconductores. Los principales fabricantes de tecnología están invirtiendo miles de millones en infraestructura de IA. Paralelamente, los gigantes tecnológicos emprenden una nueva ola de reestructuraciones internas y despidos para reorientar sus recursos hacia la IA y el cloud computing . Los mercados de materias primas críticas (especialmente Cobre y Níquel) sienten la presión de la transición energética.

Explosión de Demanda de GPUs: La inversión en modelos de lenguaje grandes (LLMs) y otras aplicaciones de IA Generativa ha provocado un crecimiento sin precedentes en la demanda de unidades de

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