Carolina del Sur enfrenta un brote de sarampión que avanza con velocidad y ya modificó la estrategia sanitaria en varias comunidades del estado. Los centros de salud confirmaron 111 infecciones y observaron un incremento de nuevos casos después del fin de semana de Thanksgiving, un período que concentró traslados y reuniones familiares. El fenómeno se concentra en el condado de Spartanburg, en el noroeste del estado, donde un templo religioso y varios establecimientos educativos aparecen como los principales focos.

Según Linda Bell, epidemióloga del Departamento de Salud estatal, la mayoría de los pacientes carece de vacunación. De los 111 casos, 105 corresponden a personas sin dosis aplicadas y otros tres a vacunación incompleta. Además, se dispusieron 254 cuarentenas y 16 aislamien

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