No hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague, hace unos meses concluía que el verdadero problema del fraude en licencias médicas no recae en un grupo específico , sino que es una práctica extendida que afecta tanto al sector público como al privado. Mientras que el sector público está más visible y sometido a mecanismos de control, el sector privado opera en mucha mayor opacidad. Esta corrupción estructural y transversal requiere dejar atrás la desconfianza hacia un solo sector y reconocer la necesidad de reformas profundas. Solo con un modelo de control eficiente, que incluya auditorías cruzadas, uso de inteligencia artificial y sanciones efectivas, se podrá frenar este cáncer silencioso que, en última instancia, todos financiamos.

Hasta ahora solo avanzamos en lo primero

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