Urtasun coge vacaciones con la Ley del Cine como principal asunto pendiente tras haber sacado adelante el Plan de Igualdad y de Derechos Culturales, además de seguir avanzando en el esperadísimo Estatuto del Artista y con la vista puesta en la gran cita del patrimonio cultural, Mondiacult
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Ni una sola palabra dedicó Pedro Sánchez al mundo de la Cultura en su balance del curso político emitido la semana pasada. Ni una sola mención a la labor realizada por el Ministerio que lidera Ernest Urtasun, y que en la misma mañana en la que el presidente del Gobierno compareció ante los medios presentó uno de los grandes avances sobre el que lleva siendo una de las grandes reclamaciones desde el sector: el Estatuto del Artista. En concreto, el Real Decreto que regulará la relación laboral de personas artistas, técnicas y auxiliares en el ámbito de las artes escénicas, audiovisuales y musicales. Aun así, habrá que esperar a la vuelta de las vacaciones para que pase por el Consejo de Ministros y finalmente entre en vigor.
Otros dos de los grandes hitos llevados a cabo en los últimos meses es la elaboración del Plan de Derechos Culturales –compuesto por 146 medidas que incluyen llevar el cine a las zonas rurales, las cárceles y entornos sanitarios– y el Plan de Igualdad, así como el inicio de la reforma del INAEM y de la devolución de los bienes incautados durante el franquismo. Menos avances ha habido en una de las leyes que se esperaba que fuera a aprobarse este año, la relativa al cine, que seguirá haciéndose esperar. Así como saber en qué se materializará la prometida descolonización de los museos estatales –de momento se está trabajando sobre dos de ellos–.
Desde el Ministerio afirman a elDiario.es que su balance es “claramente positivo”, siendo los avances realizados sobre el Estatuto del Artista los que más valoran, gracias a la reforma realizada sobre el IRPF que incorpora por primera vez mecanismos fiscales adaptados a la intermitencia laboral del sector laboral, la modificación del Real Decreto que mejorará las condiciones del personal artístico y reforzará los derechos de los menores, incorporará medidas frente al acoso y reconocerá la figura del coordinador de intimidad; y la creación de nuevas líneas de ayudas estructurales al asociacionismo y los sindicatos culturales.
Igualmente, destacan las obras de la Biblioteca Pública del Estado de Málaga y Vigo, la ampliación del Museo de Bellas Artes de Sevilla y los pasos dados en cuanto al Centro Nacional de Fotografía en Soria, destinando 500.000 euros para su primera colección. Del mismo modo, continúan ofreciendo el Bono Cultural Joven y han abierto una nueva sede para el Centro Nacional de Danza, aunque lo hizo sin dar explicaciones sobre su presupuesto, el sueldo de su directora ni la adjudicación.
La restitución de bienes incautados, “insuficiente”
Cultura publicó en junio de 2024 un listado de 5.000 obras incautadas por el franquismo y abrió el camino para reclamarlas. Este inventario incluía objetos como vajillas, cuadros, vasijas, mantones, abanicos, joyas y ornamentos litúrgicos, hallados en los nueve museos estatales, incluyendo el Museo Arqueológico, el del Romanticismo, el de Artes Decorativas y el del Traje. Hubo que esperar hasta diciembre para que se llevara a cabo la primera devolución, un retrato de Francisco Giner de los Ríos perteneciente a la Institución de Libre Enseñanza y que había permanecido en la Biblioteca Nacional.
El pasado mayo se produjo otra importante devolución: siete cuadros a la familia de Pedro Rico, el que fuera el primer alcalde republicano de Madrid. Estos se sumaron a los cinco que Gran Canaria había devuelto a sus herederos. Hay otros dos depositados en el Museo de Bellas Artes de Asturias que serán entregados “próximamente” y diez aún en paradero desconocido.
Arturo Colorado, Catedrático de la Universidad Complutense de Madrid, experto en patrimonio y Guerra Civil, y que lideró la investigación realizada en el Museo del Prado que concluyó que la pinacoteca cuenta con 70 obras procedentes de incautaciones, celebra que el Ministerio haya “asumido” las indagaciones llevadas a cabo sobre el expolio franquista, pero considera que es “parcial”. Cultura ha sido el primer ministerio en cumplir con el cumplimiento del mandato marcado por la Ley de Memoria Democrática pero, como apunta este experto, “no dice que haya que limitar la investigación a los nueve museos estatales” sobre los que la ha realizado: “El expolio es mucho más amplio”.
El catedrático, autor del libro Arte, botín de guerra. Expolio y diáspora en la posguerra franquista, recuerda que hay más obras incautadas en distintos ministerios, ayuntamientos, gobiernos militares, universidades y la Iglesia. “Me pregunto si para los exiliados y represaliados del franquismo esta investigación no es una decepción. La mayoría de estas obras están en otros lugares”, insiste. El experto critica también que la investigación haya sido interna. “Se ha realizado a través de funcionarios, choca por la falta de objetividad que supone. No ha habido un grupo de expertos como sí ocurrió en el Prado o recientemente en la Universidad de Barcelona”, comenta. Para Colorado es igualmente importante saber si el ministerio considera que “ha cubierto el expediente” o si “va a asumir la totalidad de la investigación”, ampliándola más allá de los museos estatales.
Desde el Ministerio avanzan que “hay otros procesos en marcha que verán la luz próximamente”, sin ofrecer, de momento, más detalles.
Ley del Cine, pendiente
La Ley del Cine era una de las apuestas que más se confiaba que se desarrollaría durante este curso político, pero finalmente se ha quedado pendiente. Desde Cultura indican que su prioridad es “lograr un amplio consenso parlamentario” para sacar adelante una norma “muy ambiciosa, necesaria y ampliamente demandada por el sector”, que avanzan que apuesta por la internacionalización, la protección del patrimonio, el apoyo a nuevas tecnologías y formatos, la accesibilidad universal y el impulso a la producción en todas las lenguas del Estado.
Entre sus principales novedades está uno de los puntos que más discordancia generó en su elaboración: la producción independiente, empezando por la definición en sí del concepto. De ahí a que desde la cartera liderada por Urtasun su refuerzo sea una de las prioridades para la nueva norma. También contemplará cuotas de pantalla que incluirán el cine latinoamericano y dirigido por mujeres, así como medidas de igualdad y visibilización de las mujeres en el audiovisual y la creación del Consejo Estatal de la Cinematografía y la Cultura Audiovisual como órgano permanente de diálogo. Todavía no hay fecha prevista para su materialización.
Desde el sindicato de guionistas ALMA indican a este periódico que contaban con un calendario “más corto” para su aprobación. Eso sí, celebran que se haya producido la recuperación de ayudas a los trabajadores de su sector, que habían dejado de darse durante diez años. “Ha sido una lucha de mucho tiempo”, reivindican para explicar que, por fin, se han establecido unas bases que responden a sus necesidades.
A su vez, ponen el foco sobre otro de los huesos duros de roer a los que se está enfrentando: la regulación de la IA, que definen como “una urgencia para todo el mundo en direcciones muy distintas”. Según avanzaron el ministro de Cultura y la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, la semana pasada en la presentación del texto que lo regulará, los derechos de propiedad intelectual frente a la IA serán incorporados por primera vez a la legislación.
La imagen y/o voz de las personas artistas, así como el resto de los resultados de la actividad contratada, tales como la obra musical o escrita, las interpretaciones o ejecuciones artísticas no formarán parte de los contratos; ni tampoco su uso por parte de las empresas o su cesión a terceros para replicarlas o generarlas mediante sistemas de IA generativa. Solo podrá producirse cuando exista acuerdo expreso formalizado por escrito.