El Levante UD renovó ayer su compromiso anual con la ciudad en la tradicional ofrenda floral a la Virgen de los Desamparados, patrona de València. La cita reunió a las plantillas al completo del primer equipo masculino y femenino, y al cuerpo técnico de ambas escuadras, así como al Consejo de Administración con el presidente Pablo Sánchez al frente. Tampoco faltó el entrenador del primer equipo, Julián Calero, en uno de los primeros actos oficiales de la nueva temporada en la que el conjunto granota retorna a la Primera División del fútbol español.
Tras el acto, los capitanes del equipo masculino y femenino compartieron sus sensaciones en el exterior de la Basílica, así como el presidente del club. Precisamente, Pablo Sánchez valoró el mercado estival en Orriols: «Hemos hecho ocho incorpo