El crimen de Gustavo Rivero quedó filmado por cámaras del barrio. Al volver de una despedida del año con sus compañeros de trabajo, cerca de las 3 de la madrugada, el metalúrgico detuvo la marcha de su Peugeot 408 blanco en Gálvez y Liniers. A los diez minutos se acercaron cuatro jóvenes, obligaron a descender a la mujer que lo acompañaba y al no poder robarle el auto al conductor le dispararon dos veces. Murió después de describir a sus atacantes a la policía. Hubo dos detenidos en el momento y otro apresado hace cuatro meses: los tres irán a juicio bajo un pedido de prisión perpetua.

La pena fue requerida por el fiscal Adrián Spelta esta semana durante una audiencia previa al debate oral por el caso. El juez Hernán Postma hizo lugar al planteo acusatorio y rechazó pedidos de liber

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