
Cantabria , una de las comunidades autónomas más valoradas por su paisaje costero , es también uno de los destinos turísticos más demandados en verano. Su combinación de clima suave , entorno natural protegido y una gran oferta de playas para todos los gustos la convierten en el lugar ideal para quienes buscan descansar en plena naturaleza, practicar deportes acuáticos o simplemente disfrutar de la costa cantábrica.
A continuación, repasamos cuatro playas emblemáticas del litoral cántabro, recomendadas tanto por visitantes como por expertos en turismo local, y que destacan por su belleza, accesibilidad o entorno natural.
1. Playa de El Sardinero (Santander)
Es uno de los símbolos del turismo clásico en Cantabria . Con una amplia extensión de arena dorada y un ambiente animado durante todo el verano, El Sardinero es ideal para paseos frente al mar, deportes náuticos y para quienes valoran la proximidad a la ciudad . Su combinación de tradición, servicios y vistas al Cantábrico la hacen imprescindible para quienes visitan la capital regional.
2. Playa de Oyambre (Parque Natural de Oyambre)
Ubicada en uno de los entornos más valiosos de Cantabria, esta playa forma parte del Parque Natural de Oyambre , entre los municipios de San Vicente de la Barquera y Valdáliga . Se trata de un espacio con dunas móviles, marismas y vistas a los Picos de Europa , donde el paisaje predomina sobre la presencia humana. Muy apreciada por surfistas y amantes de la naturaleza , mantiene un bajo grado de urbanización y cuenta con protección ambiental.
3. Playa de Langre (Ribamontán al Mar)
Encajada entre altos acantilados de roca caliza , la playa de Langre es una de las más espectaculares del litoral cántabro. Su carácter semi-salvaje y el hecho de que solo se pueda acceder a pie le otorgan una atmósfera especial. De arena fina y aguas limpias , es frecuentada por surfistas y excursionistas que buscan escapar de los destinos más masificados.
4. Playa de Somo (Ribamontán al Mar)
Una de las más extensas del norte de España , con más de cuatro kilómetros de arena fina , Somo se ha consolidado como un referente del surf en el Cantábrico . Además de su belleza, dispone de múltiples escuelas de surf y servicios turísticos que la hacen accesible y cómoda para visitantes de todos los perfiles. Está conectada con Santander mediante un servicio de barco a través de la bahía , lo que facilita el acceso sin necesidad de vehículo.
Desde playas urbanas como El Sardinero , hasta espacios protegidos como Oyambre o acantilados escondidos como los de Langre , Cantabria ofrece alternativas para todos los perfiles de viajero. Naturaleza, surf, relax y autenticidad son los ingredientes principales de una costa que cada verano sigue ganando nuevos visitantes fieles.