
En los últimos diez años, Europa ha perdido 2,3 millones de empleos de baja cualificación. Este retroceso se produjo antes de que la inteligencia artificial (IA) comenzara a tener un impacto significativo en el mercado laboral . En este sentido, la IA es una herramienta que podría reemplazar al ser humano en muchas tareas tradicionalmente asociadas a los puestos de trabajo que no requieren formación superior.
Entre los años 2014 y 2024, el empleo de alta cualificación ha aumentado en 20,8 millones puestos en la Unión Europea (UE), mientras que las oportunidades laborales para aquellos que cuentan con un menor nivel de formación han decrecido. Así lo ha confirmado el informe El Reto Generacional en el Mercado Laboral de Randstad Research.
La pérdida de oportunidades de trabajo de baja cualificación se explica, entre otras razones, por la transformación del tejido productivo , la incorporación de nuevas tecnologías y la paulatina automatización de procesos que anteriormente requerían mano de obra .
Factores como la digitalización , la automatización y la adaptación de las empresas a nuevos modelos de negocio seguirán concentrando la creación de empleo en puestos que requieren estudios superiores o formación técnica avanzada . Simultáneamente, el número de trabajos que pueden desempeñar personas con baja cualificación seguirá reduciéndose.
La progresiva implantación de tecnologías inteligentes, capaces de realizar tareas repetitivas, de control de calidad o de soporte básico sin intervención humana, está modificando la estructura del empleo antes incluso de que la inteligencia artificial alcance su plena capacidad de desarrollo .
Según el análisis, la tecnología puede aumentar la productividad y reducir costes , pero su incorporación implica eliminar ciertos puestos de menor complejidad que, hasta ahora, habían constituido oportunidades de inserción laboral a personas con formación básica.
Si bien la desaparición de este tipo de empleos se ha producido principalmente por cambios económicos y tecnológicos previos a la IA, el avance de esta herramienta plantea un escenario en el que la sustitución de trabajadores no se limitaría a tareas de baja cualificación.
La inteligencia artificial, si bien aún está desarrollando su potencial , ya es capaz de procesar información compleja , realizar analizar datos , generar contenido de distintas modalidades y tomar decisiones en entornos laborales. Así, en un futuro próximo, podría impactar sobre empleos que requieren un alto nivel de formación académica y profesional.
El empleo cualificado y la IA
Los datos recogidos en el informe de Randstad Research evidencian que este crecimiento del empleo cualificado en Europa no ha sido homogéneo. Turquía encabeza la lista con un crecimiento del 88,2% en el número de empleos para titulados universitarios en la última década, seguido por Portugal con un 58,2% y Países Bajos con un 48,8%. España , por su parte, ha creado 2,7 millones de empleos para personas con formación universitaria, lo que representa un aumento del 37,8% respecto a 2014.
El informe indica que más de la mitad de los titulados en los países analizados proceden de tres áreas de estudio : Administración de Empresas y Derecho, Ciencias de la Salud e Ingeniería. Aunque sectores como el de las tecnologías de la información y la comunicación y las disciplinas STEM (por sus siglas en inglés): ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, presentan una alta demanda de empleo, su peso en el total de graduados sigue siendo minoritario, lo que genera tensiones a la hora de cubrir vacantes .
En España, los tres sectores con más puestos de trabajo sin cubrir son la administración pública y defensa , con una tasa del 3,4%, la información y comunicación, con un 1,5%, y las actividades profesionales y científicas , con un 1%.
Estos datos muestran que incluso en áreas con un alto nivel de cualificación , el mercado laboral se enfrenta a la dificultad de encontrar trabajadores que respondan a los requerimientos de cada actividad o sector.