Berlín, 13 ago (EFE).- El Gobierno del canciller alemán, Friedrich Merz, cumple 100 días en el cargo en medio de crisis múltiples por resolver, que van desde lo económico hasta la difícil situación internacional y ante la presión que representa la fortaleza que sigue mostrando en las encuestas la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD).
Merz llegó a la jefatura de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU), con el propósito declarado de reducir a la mitad a la AfD, recuperando a los votantes conservadores que se habían alejado de su formación decepcionados ante el giro hacia el centro de la era de Angela Merkel.
Desde entonces, la AfD ha duplicado sus resultados electorales convirtiéndose en los últimos comicios generales en el partido más fuerte de la oposición. Merz ha inter