En plena oleada de incendios en Castilla y León –con 15 focos activos, miles de hectáreas arrasadas y casi 4.000 evacuados– el Gobierno ha optado, como de costumbre, por la propaganda. El ministro de Transportes, Óscar Puente, natural de la región, publicó un tuit tan carroñero como sectario: «¿Queréis libertazz, pocos impuestos y servicios de bomberos bien dimensionados? Todo no se puede». La insinuación es clara: si la Junta no dispone de medios, es por su supuesto «ultraliberalismo» fiscal.
El problema es que ni las formas ni el fondo se sostienen. En lo formal, aprovechar una tragedia para vender tu mercancía ideológica es poco decente. En lo material, el argumento es ignorante y anumérico. Castilla y León no es un paraíso fiscal: su tipo marginal máximo del IRPF es del 46%, entre los