
El Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés) devolvió este miércoles al Gobierno de México un manuscrito robado que lleva la firma del conquistador español Hernán Cortés, según un comunicado publicado en la página web de la agencia estadounidense.
Today, the FBI returned a stolen manuscript signed by Spanish conquistador Hernán Cortés to the government of Mexico. The repatriation of this priceless cultural artifact—which authorities believe was stolen in the 1980s or 1990s—was the result of close collaboration between… pic.twitter.com/OCuOIOqkUm
— FBI (@FBI) August 13, 2025
"Esta es una página original del manuscrito, firmada por Hernán Cortés el 20 de febrero de 1527 ", explicó la agente especial Jessica Dittmer, miembro del Equipo de Delitos de Arte del FBI y del Grupo de Trabajo Conjunto contra Robos Mayores de ese organismo y del Departamento de Policía de Nueva York.
Asimismo, detalló que el documento describe el pago en pesos de oro común para gastos de preparación destinados al descubrimiento de las tierras de las especias, por lo que realmente "ofrece una idea clara de la planificación y preparación para territorios inexplorados en aquel entonces".
En este sentido, indicó que el documento tiene importancia histórica porque contiene un relato completo de los detalles logísticos y de planificación relacionados con el viaje de Cortés a lo que eventualmente se convertiría en el territorio de Nueva España, que se extendía desde el sureste del actual estado de Washington, a través de Luisiana, y se adentraba en lo que ahora es Centroamérica.
"Piezas como esta se consideran bienes culturales protegidos y representan momentos valiosos de la historia de México , por lo que es algo que los mexicanos tienen en sus archivos para comprender mejor la historia", remachó Dittmer.
La repatriación de este invaluable bien cultural, que las autoridades creen que fue robado entre las décadas de 1980 y 1990, fue el resultado de una estrecha colaboración entre el FBI, el Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York, el Departamento de Justicia de EE.UU. y el Gobierno de México.