Si la reunión que este viernes mantendrán Donald Trump y Vladimir Putin se hubiera celebrado hace 150 años habría tenido lugar en territorio ruso. En 1867, la Rusia de los zares vendió al Gobierno de Washington este enclave -que hoy es el quinto mayor estado de Estados Unidos- por algo más de 7,2 millones de dólares. Los dos mandatarios acuden a una cita histórica, cargada de simbolismo, en su primer encuentro desde el inicio de la guerra de Ucrania. El objetivo es tratar de allanar un acuerdo de paz entre Moscú y Kiev y profundizar en las relaciones económicas entre las dos potencias, y en este punto el petróleo va a jugar un papel clave.

A lo largo de los últimos días, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, y los socios europeos han intensificado los esfuerzos para evitar cualqui

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