El descubrimiento de una proteína que limita la acción de los linfocitos T abre nuevas perspectivas para quienes enfrentan tumores resistentes tras una infección viral.
El virus del papiloma humano tipo 16 (VPH16) , responsable de la mayoría de los casos de cáncer de cuello uterino y casi el 90% de los cánceres de garganta asociados al VPH, mostró una capacidad inesperada para manipular el sistema inmunológico y favorecer el crecimiento tumoral.
Un estudio reciente de la Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California (USC) identificó que el VPH16 provoca la producción de la proteína IL-23, que impide que las células inmunitarias ataquen el tumor de forma eficaz.
Los investigadores comprobaron que, al bloquear esta proteína en modelos animales